El 10 de julio recibí un mensaje de un hombre que creció en Niños de México, quien me explicó que había sido víctima de una aparente conducta sexual indebida por parte de Steve Ross en los años 90, mientras Steve servía como padre de casa.
Antes de explicar más, es importante que amplíe el contexto de mi propia divulgación de este reporte de abuso y la evolución de mi propio pensamiento respecto a los asuntos más amplios que rodean el comportamiento presuntamente indebido de Steve.
En 2023, se publicó un artículo en el Washington Missourian. Se me citó de una manera que hacía parecer que yo creía que Steve podía haber abusado sexualmente de menores, lo cual era lo contrario de mi intención original.
Mi intención original era dejar claro que no creía que Steve hubiera abusado sexualmente de ningún menor.
De hecho, me preocupaba tanto esta posible mala interpretación que publiqué una corrección en este mismo blog el 21 de noviembre de 2023. Esto fue más de un año y medio antes de que recibiera la divulgación sobre la presunta conducta indebida.
Mi propio despertar lento respecto a la realidad del abuso en Niños vino primero a través de una afirmación explícita de abuso y omisión que abrió mis ojos a otras cosas que había visto o que me habían contado. Del mismo modo, la revelación de este individuo puso en contexto otras piezas de información que abarcan desde 2018 hasta 2025.
Piezas de información importantes
P1. En 2018, mientras estaba en México durante mi pasantía en una iglesia de Niños, dos adultos me contaron sobre una ocasión que presenciaron años atrás mientras estaban presentes en el departamento de Steve en Génesis, en San Vicente. Era de noche, y mientras se preparaban para salir, algunos menores varones de la casa Bethel en Texcoco entraron al departamento de Steve. Se decidió frente a estos testigos que los menores varones pasarían la noche en el departamento de Steve en lugar de regresar a su hogar en Texcoco. Estos adultos recordaron cómo se miraron entre sí con asombro ante la inapropiedad de la decisión y cómo esto les hizo preguntarse si “Hermano Steve” también era un abusador. Señalaron que la esposa de Steve no estaba presente.
P2. Este año (2025), fui informado por una ex madre/padre auxiliar que recordó haber sido testigo de que Steve le dio un regalo a uno de los menores varones en Niños hace muchos años (c. 2013–2014). Después de que Steve se fue, uno de los otros menores comentó que su compañero había recibido el regalo a cambio de un favor sexual que había realizado con Steve. Esta auxiliar no recordaba qué menor recibió el regalo, pero sí dijo que el comentario había quedado “grabado en su mente”, y me dio el nombre del comentarista. Ella también me volvió a contar de manera independiente el incidente previo de los menores quedándose a dormir en el departamento de Steve, el cual le había sido relatado por los mismos adultos que me lo contaron a mí.
P3. En 2023, una ex empleada de Niños de México me relató cómo años antes había presenciado que Steve agarró las nalgas de uno de los menores de la institución mientras estaban en el complejo Génesis. Recordó haberse quedado atónita por lo que había visto. Aclaró posteriormente que no se encontraban en un evento deportivo, que Steve no era entrenador y que el menor no era jugador, enfatizando que no había ninguna circunstancia en que ese toque pudiera considerarse apropiado de parte del director de un hogar de niños hacia un menor.
P4. En el informe de GRACE se reportó que Steve, al menos en una ocasión, llevó a menores del instituto a un viaje de campamento en el que él era el único adulto acompañante (Informe 196).
P5. En el informe de GRACE, Steve menciona que las autoridades en México pensaban que él había agredido sexualmente a un menor que resultó gravemente herido mientras estaba bajo su cuidado (196) y que finalmente murió por sus lesiones, pero nunca explica por qué las autoridades llegaron a tal conclusión. La respuesta implícita es evidencia física de un aparente abuso previo del menor, como “cicatrices rectales preexistentes” (202). Sin embargo, como señala el informe de GRACE, “...estos detalles podrían usarse para desviar la culpa” (202).
Además de estos cinco puntos, múltiples personas—incluyéndome a mí, a un ex empleado, a un ex voluntario y a un ex residente—habían notado la aparente preferencia y favoritismo de Steve hacia los residentes varones sobre las residentes femeninas. A continuación se muestra una captura de una conversación que tuve a principios del año pasado, en la que una ex residente me pidió dinero, explicando que ya se lo había pedido a Steve pero que él no había respondido. Ella concluyó que el hecho de no ser
hombre tenía algo que ver con su falta de disposición para ayudarla. El punto no es si esa conclusión es verdadera o no. El punto es que el favoritismo o preferencia de Steve por los residentes varones de Niños era algo visto y sentido por una diversidad de personas, incluida esta ex residente.Asimismo, hablé con un ex patrocinador de Niños que me transmitió su deseo insistente de hablar con GRACE sobre sus preocupaciones acerca del comportamiento de Steve, observado a lo largo de los años, y cómo le recordaba a un familiar suyo que era abusador de menores. Admitió que no había visto nada inapropiado, pero sí un patrón de comportamiento que lo hacía sentir incómodo al grado de creer necesario hablar con los investigadores.
El testimonio del presunto sobreviviente
Lo que este presunto sobreviviente me dijo fue que había sido tocado por Steve durante un viaje de campamento. Él compartía una tienda con Steve y, en la noche, despertó para encontrar la mano de Steve en sus partes íntimas, mientras Steve aparentemente fingía estar dormido.
Esta historia tiene sentido a la luz de la aparente disposición de Steve para quedarse solo con menores varones de Niños durante la noche en entornos íntimos (P1), incluyendo su propia admisión de acampar a solas con menores varones en los primeros años de su tiempo en Niños (P4). También tiene sentido a la luz de P3 y el testimonio de contacto inapropiado.
La veracidad de esta historia también explicaría muchos otros factores, como el trato preferencial de Steve hacia los varones, así como sus años de encubrimiento, ocultamiento y mentiras sobre abusos y su manejo dentro de la institución, como lo evidencia el informe de GRACE. También explicaría P5.
Respuestas a algunas preguntas
¿Por qué no dijiste nada antes?
Yo tenía una política: no hablar públicamente sobre un incidente o reporte de abuso a menos que una víctima o testigo hablara conmigo directamente. Así que, aunque había entregado la información que tenía a GRACE, no fue hasta que el presunto sobreviviente me contactó y pude hacerle preguntas, que consideré que había suficiente duda razonable para proceder públicamente. Yo esperaba que el presunto sobreviviente hablara con GRACE, pero decidió no hacerlo.
¿Qué estás afirmando en resumen?
Múltiples testimonios independientes de una diversidad de personas han evidenciado un patrón de comportamiento inquietante por parte de Steve hacia menores varones de la institución que podría incluir abuso.
¿Por qué estás diciendo esto? ¿Qué quieres que pase con esta información?
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Que el gobierno mexicano inicie una investigación/informe inmediata e imparcial sobre esta información, incluyendo la sospechosa muerte del menor mencionada en el informe de GRACE (1998).
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Que el gobierno estadounidense, ya sea Seguridad Nacional o el FBI, inicie una investigación/informe inmediata e imparcial sobre esta información, incluyendo la sospechosa muerte del menor mencionada en el informe de GRACE.
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Que la Junta Directiva de Niños encargue una investigación/informe independiente e imparcial sobre esta información, incluyendo la sospechosa muerte del menor mencionada en el informe de GRACE.
Espero que otras posibles víctimas lean esto y tengan el valor de dar a conocer sus historias a las autoridades competentes.
Reflexiones finales
No quería escribir esto. No quiero escribir esto. No solo me enferma esta información, sino que tampoco deseo volver a ponerme en el centro de la controversia después de tres años brutales en los que mi fe, integridad y carácter han sido difamados y cuestionados. Sin embargo, esta información es demasiado importante y demasiado seria como para dejarla pasar.
No estoy declarando a Steve culpable de nada.
Estoy instando a las autoridades en México y Estados Unidos, a la luz de las recientes revelaciones del informe de GRACE, a realizar su debida diligencia e investigar.
Si no se encuentra que se cometió ningún delito, el nombre de Steve será limpiado.
Si se descubre que se cometió un delito, las víctimas recibirán la justicia que merecen.
Sea cual sea el caso, la fortaleza del silencio y el secreto no puede tener la última palabra.
